Piel grasa: productos y rutinas básicas para el cuidado facial

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¿Conoces tu tipo de piel? ¿Sabes qué productos y rutinas son los adecuados para ti? Estas preguntas son esenciales para identificar los problemas que presenta tu piel y para comenzar un cuidado adecuado acorde a la piel del rostro. Partiendo de esta información y aplicando la constancia, conseguirás la piel deseada: hidratada, nutrida y, sobre todo, cuidada.

En el post de hoy nos centramos en la piel grasa, la cual requiere de una rutina precisa para el control de sebo, brillos e imperfecciones. Desde nuestra amplia experiencia, te aconsejaremos productos y rutinas básicas para el cuidado facial de este tipo de piel.

La piel grasa presenta una cantidad excesiva de sebo, que puede derivar a piel acneica dando lugar a aparición de imperfecciones en el rostro o en el cuerpo, alterándose la cantidad de sebo y multiplicándose ciertas bacterias de forma anómala.

Suele ser más habitual de lo que pensamos. Sus causas están relacionadas con una predisposición genética (manifestada en la etapa de la pubertad debido a los cambios hormonales), épocas de estrés, la alimentación, la sequedad, el tabaco, deporte, la polución, falta de rutina facial…

¿Cómo sé si tengo la piel grasa? Si los poros tienden a estar dilatados, el rostro suele tener brillos y rojeces localizados por diversas zonas, además de tener puntos negros y granos, la piel es grasa.

Te proponemos a continuación una rutina facial ideal para controlar las pieles grasas, así como algunos productos para llevarla a cabo:

La piel suele tener mejor aspecto por la mañana, pero a medida que avanza el día, se vuelve cada vez más brillante. Por ello, es esencial una limpieza correcta de la cara utilizando productos que limpien la queratina, ya que su acumulación es la causa de los puntos negros.

En estos tipos de piel, las rutinas de cuidado facial tienen por objetivo controlar el exceso de sebo y están centradas en la limpieza constante, ya que su función es fundamental para ayudar a eliminar las partículas sobrantes y corregir la cantidad de grasa.

1. LIMPIAR: imprescindible. Con la limpieza se eliminan las células muertas que se quedan retenidas en la piel causando obstrucción. Se debe realizar tanto si se utiliza maquillaje o no. Es aconsejable realizarla dos veces al día (por la mañana y por la noche antes de dormir), con agua templada y con productos libres de jabones agresivos que puedan afectar el estado de nuestra piel.

Te proponemos: Avéne Cleanance Gel.

2. TONIFICAR: Aplica un tónico específico para piel grasa o piel mixta, que contribuirá a absorber los lípidos y polímeros de los poros, además de cerrarlos para evitar que entre suciedad no deseada.

Te proponemos: La Roche-Posay Effaclar Solución Micelar Ultra Piel Grasa.

3. HIDRATAR: con productos que actúen sobre el sebo sin resecar en exceso ni aportar más grasa. Si una piel no está bien hidratada, puede dar lugar a producir más grasa debido a que las glándulas sebáceas actuarán para cubrir esa necesidad.

Te proponemos: Bioderma Sebium Mat Control.

Y ahora… ¡PROTEGER! La protección solar siempre es importantísima y más tratándose de pieles delicadas sometidas a tratamientos anti-acné (ya sean orales o tópicos).

Te proponemos: Avene Solar Cleanance.

Si te maquillas diariamente y te ayuda a verte mejor, a pesar de tener piel grasa, ¡puedes hacerlo! Pero ¡ojo! con convertirte en una persona adicta y con el riesgo de padecer a su vez acné cosmético. Lo más importante además de cuidar la piel de tu rostro para sentirte mejor, es cuidar tu autoestima también. Muchas veces nos olvidamos de ella, pero ella te hará más fuerte cada día.

Para cualquier duda o asesoramiento personalizado sobre pieles grasas u otros productos de farmacia, estamos a tu disposición en nuestras redes sociales, en info@farmagranada.com y en nuestros teléfonos 958 200 130 – 958 202 222.

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